En distintas ocasiones hemos defendido la disponibilidad del efectivo como signo de libertad y de libre albedrio para la sociedad. El 16 de marzo CashEssentials (Guillaume Lepecq) publicó un artículo sobre cambios de legislación en este asunto. El 1 de enero Suecia promulgó una nueva legislación que obliga a los bancos a proporcionar servicios en efectivo. Según Riksbank, el valor del efectivo en circulación se redujo casi a la mitad entre 2007:2018. La disminución continuó irregularmente: estuvo <5% anual entre 2007 y 2012, luego aceleró a tasas de dos dígitos en 2013, 2015 y 2016. Aquí los analistas proyectaron que el efectivo desaparecería al 100% antes del final de la década siguiente. Sin embargo, en mayo de 2018 se cruzaron las curvas. El efectivo en circulación >7,2% en 2018 y un 2,1% en 2019. Reino Unido sigue los pasos de Suecia y ha anunciado nuevas regulaciones para proteger el acceso al efectivo. Los grandes bancos tendrán responsabilidad especial de mantener los servicios de efectivo en todo el país. ¿Será suficiente un enfoque estrictamente regulatorio?

Antonio Villaseca